Un orangután llamado Rocky podría proporcionar la clave para entender cómo evolucionó el habla en los seres humanos desde la era de los grandes simios antiguos, según un estudio dirigido por el Dr. Adriano Lameira de la Universidad de Durham y publicado en la revista Scientific Reports.
Un comportamiento aprendido
El Dr. Lameira, investigador junior en el Departamento de Antropología, dirigió un proyecto de investigación para analizar si un orangután podría mostrar la capacidad de aprender nuevos sonidos y controlar su voz.
Anteriormente se pensaba que los grandes simios, nuestros parientes evolutivos más cercanos, no podían aprender a producir nuevos sonidos. Dado que la capacidad humana del habla es un comportamiento aprendido, se pensó que esto no podría haberse originado a partir de los grandes simios.
También se creía que el control de la voz, o la acción de las cuerdas vocales, que es lo que les daría la capacidad de aprender sonidos vocálicos, no era una habilidad que tuvieran los grandes simios.
Nuevos sonidos
Sin embargo, el equipo de investigación halló que Rocky, un orangután del Zoológico de Indianápolis en EE.UU., fue capaz de copiar tanto el timbre como el tono de los sonidos emitidos por los investigadores para realizar así llamadas vocálicas.
El equipo de investigación contrastó estos sonidos con la mayor base de datos disponible de llamadas orangután recogidas a lo largo de más de 12.000 horas de observaciones de más de 120 orangutanes de 15 poblaciones silvestres y en cautiverio.
Llegaron a la conclusión de que los sonidos emitidos por Rocky eran diferentes a los de la base de datos, mostrando que él era capaz de aprender nuevos sonidos y controlar la acción de su voz en un contexto «conversacional».
Una pista de los primeros pasos del lenguaje hablado
Los resultados, que sugieren que los orangutanes podrían tener la capacidad de controlar sus voces, arrojan nueva luz sobre los debates acerca de si el lenguaje hablado surgió, o no, de los primeros ancestros humanos.
El Dr. Lameira, que no era un miembro de la Universidad de Durham cuando se llevó a cabo la investigación, pero se unió al Departamento de Antropología en 2015, dijo: «No queda claro cómo evolucionó el lenguaje hablado a partir de los sistemas de comunicación de los grandes simios ancestrales”.
«En lugar de aprender nuevos sonidos, se ha asumido que los sonidos emitidos por los grandes simios son motivados por la excitación, sobre la que no tienen ningún control; pero nuestra investigación demuestra que los orangutanes tienen la capacidad potencial de controlar la acción de sus voces”.
«Esto indica que el control de la voz que muestran los seres humanos podría derivar de un antepasado evolutivo con capacidades de control de voz similares a las halladas en los orangutanes y en todos los grandes simios en general».
El habla humana
Este trabajo se basa en un estudio previo, dirigido por el Dr. Lameira cuando se encontraba en la Universidad de Ámsterdam, en los Países Bajos, en el que se descubrió que un orangután hembra en el zoológico de Colonia, en Alemania, era capaz de emitir sonidos comparables a las consonantes humanas y a llamadas vocálicas al mismo ritmo y tempo que el habla humana.
El Dr. Lameira dijo: «Nuestros últimos resultados nos abren la posibilidad de aprender más acerca de las capacidades vocales de los primeros homínidos que vivieron antes de la división en linajes entre orangutanes y humanos para ver cómo evolucionó el sistema vocal hacia el habla en toda regla en los seres humanos».
Este vídeo muestra los ejercicios que se realizaron con Rocky:
Traducción: El control de la voz por los orangutanes nos da pistas sobre el habla humana temprana. Este es Rocky, un orangután que vive en el zoológico de Indianápolis. El Dr. Adriano Lameira, de la Universidad de Durham, lideró la investigación para comprender si nuestra habilidad para hablar pudo haberse originado con nuestros ancestros, los grandes simios. Anteriormente se creía que los grandes simios no podían aprender nuevos sonidos y que por esta razón, la habilidad de los humanos de hablar no podía haberse originado con ellos. No obstante, el Dr. Lameira y su equipo de investigación han demostrado que Rocky puede imitar los sonidos hechos por un demostrador, variando el timbre y el tono. El equipo comparó esto con una gran base de datos de llamadas de orangután y concluyó que Rocky había sido capaz de aprender nuevos sonidos y de controlar la acción de su voz. Esto sugiere que la habilidad humana de controlar la voz y aprender nuevos sonidos podría remontarse a los grandes simios después de todo. Los hallazgos abren el camino para aprender más acerca de la evolución de nuestro sistema vocálico.
* Los socios del Dr. Lameira en la investigación incluyen el Zoológico de Indianápolis en los EE.UU., el Instituto Max Planck de Antropología Evolutiva en Alemania, la Universidad John Moores en el Reino Unido y la Universidad de Amsterdam en los Países Bajos.
* Rocky fue estudiado en el Zoológico de Indianápolis, Indiana, EE.UU., donde actualmente se encuentra, entre abril y mayo de 2012, y se tomaron todas las medidas posibles para garantizar que no se perturbaran su rutina y su medio ambiente.