La NASA está sopesando el riesgo de añadir astronautas al primer vuelo de su nuevo megacohete, diseñado para enviar tripulaciones a Marte.
El jefe de exploración humana de la agencia espacial explicó que su jefe y la administración del gobierno norteamericano (en estos momentos bajo el mando de Trump) solicitaron un estudio de viabilidad. El objetivo es comprender lo que se necesita para acelerar la llegada de una misión tripulada. Bajo el plan actual, los astronautas no subirían a bordo hasta 2021, en el mejor de los casos.
El Space Launch System, conocido como SLS, será el cohete más potente en cuanto comience a volar. [En ¡QFC! vimos una muestra de su increíble potencia en esta historia sobre una de las pruebas del SLS]
La NASA tiene como objetivo enviar un vuelo de prueba no tripulado para finales del próximo año. Poner gente a bordo retrasaría la misión y requeriría dinero extra. William Gerstenmaier, de la agencia espacial, dijo que si la adición de astronautas pospone el primer vuelo más allá de 2019, probablemente sería mejor seguir con el plan original.
Según Gerstenmaier, se necesitan casi tres años de margen entre una prueba de vuelo no tripulada y una misión tripulada para poder realizar los cambios necesarios en la plataforma de lanzamiento en el Centro Espacial Kennedy.
«Reconocemos que” poner a los astronautas en el vuelo inicial “será un mayor riesgo», dijo Gerstenmaier.
Los astronautas están participando en el estudio que comparará el riesgo adicional con los beneficios.
Un panel de seguridad independiente advirtió que la NASA necesita una razón convincente para incluir astronautas en el vuelo inicial, dado el riesgo. El Panel Asesor de Seguridad Aeroespacial se formó tras el incendio de Apollo 1 que mató a tres astronautas en una prueba de cuenta atrás hace 50 años en enero.
La cápsula que llevará a los astronautas, el nuevo Orion de la NASA, ya ha volado en una demostración espacial. La cápsula, que contenía recuerdos y juguetes, pero sin gente, fue lanzada a una órbita extremadamente larga de la Tierra en 2014 por un cohete Delta IV, y cayó en el Pacífico.
Normalmente, la NASA prefiere probar cohetes sin gente, aunque para el vuelo inaugural del transbordador espacial en 1981 se encontraban dos pilotos a bordo. Una pequeña tripulación de dos también está prevista para la misión 2021 SLS, que podría volar a las inmediaciones de la Luna.
Si bien un vuelo inaugural con astronautas atraería más atención, Gerstenmaier dijo que el aspecto público no será tomado en consideración.
«Hay pros y contras en ambos sentidos, y es difícil juzgar ese aspecto (el del público)», explicó a periodistas. «Pero lo veo desde un punto de vista más factual. ¿Qué gano técnicamente poniendo a la tripulación?»
La NASA espera publicar su informe en aproximadamente un mes.
Artículo original publicado por Phys. Revisado y traducido por ¡QFC!